De pequeño logró hacer algo que supuso el fin de cuantos lo intentaron: mató a Jasón Vorhees, el terrible criminal que aterrorizó a los habitantes de Cristal Lake. Y, ahora, años más tarde, Tommy se siente atormentado por el miedo que Jasón no esté realmente muerto. Así que Tommy y un amigo van al cementerio y excavan en la tumba de Jasón. Desgraciadamente para Tommy (y más aún para su amigo), en lugar de encontrar un cadáver descomponiéndose, descubre que Jasón se ha conservado a la perfección, regresando de entre los muertos para otra sangrienta aventura en está película.