Los historiadores han sostenido durante años que la historia del Rey Arturo era sólo un mito, pero la leyenda se basaba en un héroe real, dividido entre sus ambiciones personales y su sentido público del deber. Arthur sólo desea abandonar Bretaña para regresar a la paz y estabilidad de Roma. Pero antes, una última misión le lleva a él y a sus caballeros de la Tabla redonda, Lancelot, Galahad, Bors, Tristan y Gawain a la conclusión de que tras la caída de Roma, Bretaña necesitará un Rey, alguien que la defienda no sólo de la amenaza de la invasión sajona, sino también que les guíe hacia los nuevos tiempos. Bajo la guía de Merlín y la valiente y hermosa Ginebra, Arthur tendrá que encontrar la fuerza en sí mismo para cambiar el curso de la historia.