“Sombras tenebrosas (Dark shadows)” es la adaptación cinematográfica de una serie de televisión de la década de los 60 en la que se dejaban ver habituales criaturas del mundo del terror, como fantasmas, zombies, vampiros, licántropos o brujas. En el año 1752, Joshua y Naomi Collins, con su jovencito hijo Barnabas, zarpan de Liverpool, Inglaterra, para iniciar una nueva vida en América. Pero incluso un océano no es suficiente para escapar de la misteriosa maldición que ha caído sobre su familia. Pasan dos décadas y Barnabas (Johnny Depp) tiene el mundo a sus pies, o por lo menos la ciudad de Collinsport, Maine. Barnabas, el amo de Collinwood Manor, es rico, poderoso y un mujeriego impenitente… hasta que comete el grave error de romperle el corazón a Angelique Bouchard (Eva Green). Angelique, una bruja en toda la extensión de la palabra, le condena a un destino peor que la muerte: le convierte en vampiro y le entierra vivo. Dos siglos después, Barnabas sale de su tumba y emerge en 1972 en un mundo muy distinto del que conocía. Regresa a Collinwood Manor para encontrar que lo que en su tiempo era una gran casa solariega, está ahora en ruinas. A los restos disfuncionales de la familia de Collins no les ha ido mucho mejor que a la casa, y cada uno de ellos encierra oscuros secretos. La matriarca Elizabeth Collins Stoddard (Michelle Pfeiffer) ha recurrido a una psiquiatra residente, la Dra. Julia Hoffman (Helena Bonham Carter), para que la ayude en sus problemas familiares.